martes, 8 de enero de 2013

" Queridos Reyes Magos de Oriente, intuyo que estáis algo enfadados o molestos conmigo ya que este año habeis pasado por mi casa moviendo la mano mientras pasabais de largo. Y ahora direis que vuestro regalo ya lo recibí hace unos dias, antes de cualquier niño, que suerte! Mi regalo no es material, es auténtico, con un mensaje navideño de amor, perdón y misericórdia. 
¿Me habeis visto demasiada cara de atea y me estáis dando una lección? 
Quizás estáis hartos de niñas como yo, que odian la Navidad y aprovechan para sabotear toda muestra de tradición diciendo palabras malsonantes con el pica pica y utilizando el sarcasmo junto con el redondo de pollo. Si es así, grácias, ya buscaré vuestro regalo en algo que me pueda beneficiar. Me tomaré esto como otra prueba más para tentar a mis nervios, para decidicr entre paciéncia o muerte y sobretodo para serme fiel a mi misma. También quería una tablet y un móvil con central espacial, como mis amigos, pero ya me esperaré a otro año que me haya portado mejor. Otro año en el cual haya callado eso que pienso, que haya controlado mi carácter y que me haya comprado las chinchetas de la sonrisa, para próximas cenas familiares y demás.
Pero siento comunicarle a sus majestades que no os he escrito para quejarme, ni mucho menos. Os he escrito para pediros por favor que no regaleis más libros de autoayuda. Como ya no sabía a quien recurrir he contactado con vosotros, los altos cargos de este paripé. No os pido que rectifiquéis los regalos de este año ya que habéis tenido un largo viaje des de Laponia o des de alguna parte de ese famoso "Oriente". Esta demanda es para que el año que viene os dejeis de polladas (con perdón a sus majestades) y si queréis regalar literatura, que sea de verdad. Ahora sí, por fin y después de tres años puedo decir que odio profundamente la autoayuda y a todo aquel depresivo que la lee, convirtiéndose en el súper hombre (hinchable) de Niestzche por leer a cuatro saca cuartos sin escrúpulos. Más de una amiga mia estaría muy orgullosa de mi si leyera esto, señor Baltasar. Toda esa psicología barata de manual es autodestructiva y asquerosamente empalagosa para que los desamparados encuentren un timón invisible que guié sus vidas.  Me estoy agriando, sí, llevo doble de vinagre, también, pero almenos ningún libro por muy bien escrito que esté me dirá quién soy ni que coño pinto en este teatro de marionetas, todas ellas ansiosas por conocer a su titiritero. 
Seré yo quién lo descubra y si no es ahora ya lo haré otro año que me porte mejor.



Con todos mis respetos:

Adriana. G Andreo "







PD: Shhh,, los reyes no són los padres, són la Jacqueline.

No hay comentarios:

Publicar un comentario